Haylee D. Humphrey {Ficha}

Frívola, malvada, egoísta, estúpida; esas no son características de Haylee. Reconocida en su hogar por ser la que siempre tiene un sonrisa para ti; pero no una de esas fingidas, sino de las que provienen directo del corazón. Ante tanto horror que en Panem existe, algunas personas piensan en ella como alguien que vive en otro mundo; por su singular alegría y entusiasmo. Muy poco, o mejor dicho nada, le importa a Haylee lo que piensen, pues su forma de ser y no desea cambiarla.

Solidaria como nadie, muchas veces piensa en los demás antes que en ella. Cuando ve a alguien herido, ya sea física como sentimentalmente, tiene una necesidad profunda de correr a su auxilio. Detesta que le mientan, pues lo considera absurdo; ya que las mentiras siempre terminan saliendo a la luz. No le gustan ni nunca le gustarán los Juegos del Hambre; los considera un atrocidad enorme, una "entretención" estúpida y macabra. No es la sangre, ni las armas, ni la forma de muerte; sino son las vidas perdidas de muchos jóvenes, eso hace que hasta ella llore la muerte de cada tributo. No espera el momento en el que alguien aparezca y forme un rebelión en contra de la forma de gobierno, pues ella se unirá y luchará, sin pensarlo dos veces.

Todos tienen un lado macabro, ¿no es cierto? Pues, Haylee no es la excepción. Kilos y kilos de odio al Capitolio carga esta muchacha en su espalda, y sabe que jamás podrá librarse de aquello; pues tiene un rencor personal, los Juegos fueron los responsables de la muerte de su hermana, que una vez había sido tributo. Valiente como ninguna, protege a los que quiere y le importan; no teme luchar contra un gigante, pues los grandes son los que más fácil caen; según ella. Aunque no muchos crean, es una joven sumamente astuta; cuando lo desea calcula fríamente, pero es un lado que esconde a toda costa. Muy ágil en la lucha, además de ser rápida y mucho más fuerte de lo que aparenta; pero lo que a Haylee se le da perfecto es lanzar cuchillas con una puntería envidiable.

Cabellos rubios dorados, que caen de manera liza hasta la mitad de su espalda. Sus ojos son la que la caracterizan; pues son de un azul mar brillante, que resalta entre sus otros rasgos. Estatura mediana, debe de medir 1.65 cm o quizás un poco más. Piel pálida, sin importar las horas trabajando en los cultivos de su distrito. Complexión delgada, de curvas poco pronunciadas. Sus rasgos son como los de una muñeca, algo que siempre la ha hecho ver indefensa y delicada.

Hija del medio de una familia de escasos recursos, como la gran mayoría de las familias de su distrito, el 11. Muy poco tiempo pasaba con sus padres, pues ambos trabajaban en los cultivos del 11. A la simple edad de 10 años, Haylee sufrió una gran pérdida; su hermana mayor fue tomada como tributo del 11 por el Capitolio, y, aunque le hubiera prometido a su hermanita menor volver a casa como vencedora, nunca regresó. Haylee tuvo que sentarse frente a la televisión, junto a sus padres, para verla ser asesinada por un chico del Distrito Cuatro; desde entonces que Haylee conoce el odio que lleva ocultando tanto tiempo, pero no hacia el chico, sino que hacia el Capitolio.

Cansada de ver a sus padres romperse la espalda de tanto trabajar, decidió ser otra fuente de mantenimiento en la familia; dejando a su hermana menor, nacida meses después de la muerte de su hermana mayor, con una vecina amiga. Logró trabajar como recolectora y, desde entonces, que han tenido un poco más de dinero; el cual permitía el pan en la mesa todos los días y ropas nuevas de vez en cuando. Sin embargo, ella nunca dejó los estudios.