Mortimer Lacrivore & Nerwen Ringëril (D.12) | 74º ½ JDH.

por **Julius Tumblrman** Miér 21 Dic 2011, 03:58

DISTRITO 12 ENTREVISTAS
En cuanto hayan posteado Mortimer Lacrivore & Nerwen Ringëril en el Plató Entrevistas, empezará este rol.

(Habéis posteado los dos, así preparaos que en nada haré el post para empezar ^^.)

por **Julius Tumblrman** Miér 21 Dic 2011, 12:10

¡Ya acabando! Asi lo anunció Julius al público, que respondió con un sonoro "ooooh" que indicaba que querían que aquel espectáculo continuara. Pero no, sin duda iba tocando a su fin, y en el fondo seguramente muchos querrían marcharse de allí ya. Los capitolianos a sus lujosas casas para seguir los juegos desde la comodidad de su hogar, y los tributos a seguir preparándose para las difíciles jornadas que les esperaban. Julius siguió hasta el último momento ayudando a todos y cada uno a conseguir patrocinadores y popularidad, lo cual les vendría muy bien en unos días. Toda ayuda era poca, así que había intentado también hacerlos ver simpáticos y atractivos a la vista de los Capitolianos. Algunos se habían resistido, pero era mucho pedir que actuaran frente al público cómo si nada, cuando al fin y al cabo no eran más que víctimas. En solidarización, Julius mantenía al público activo desde el primer momento y ayudaba en todo lo que podía. Por fin anunció la llegada de las entrevistas de los dos últimos tributos, del distrito 12. Haciendo como que bailaba alguna canción lenta, se acercó melancólica y rápidamente hacia la tributo que le tocaba entrevistar en ese momento, Nerwen Ringëril, y le tendió una mano dejando a su elección si quería acompañarla hasta el sofá de nuevo para comenzar la entrevista. Sentándose en éste, Julius comenzó con las preguntas.

—¡Bueno, querida Nerwen! Espero que no estés nerviosa o creas estar desestimada por ir de las últimas, ¡muchas veces lo mejor viene al final!—exclamó Tumblrman, mientras miraba al público buscando apoyo, el cual respondió con una ovación de confirmación—. Todos hemos podido comprobar tras las cámaras que tienes mucho carácter, aparte de belleza, unos preciosos... ojos y un vestido que te sienta de maravilla y me quita el aliento—dijo Tumblrman, mirando hacia ella y soltando un silbido mientras abría mucho los ojos, lo que hizo reír al público—. Sé que es mucho preguntar, ¿pero esta actitud es tuya natural o lo haces por intimidarnos a todos? ¡Porque de ser así lo estás consiguiendo, al menos conmigo!—rió Julius.

por **Nerwen Riverside** Miér 21 Dic 2011, 23:37

Por muy difícil que fuera de creer, Nerwen no prestó atención a las entrevistas de los otros tributos, estuvo perdida en su mundo, pensando en su hermana, imaginando las palabras de su familia (consejos, advertencias, reproches…) y quedando en trance con la mirada fija un punto, sin tan siquiera levantar la mirada y dando apariencia de ser más agresiva de lo que en verdad era. Solo la voz de Julius Tumblrman justo a su lado anunciando la llegada de su entrevista regresaron a la morena hasta el plató de entrevistas. Poco a poco alzó la vista, sin sonreír aún, posando sus ojos verdes en el extravagante presentador y después desviándolos a la mano que tendía hacia ella. Nerwen estuvo dubitativa en aceptar su ofrecimiento o levantarse toda airosa para ir hacia el sofá, llegó a la conclusión que un término medio sería algo más que aceptable tanto para ella como para la audiencia así que puso su mano solo para descruzar sus piernas y ponerse en pie, luego la abandonó y caminó con la cabeza alta hacia el sofá de entrevistas sin aún despegar los labios para decir una palabra.

Miró al público centrado en la emoción de los juegos, esperando ver a sus compañeros y a ella derramar sangre en los juegos para su entretenimiento. Le daban asco. Tuvo la tentación de responder a la primera afirmación del presentador con un “ prefiero estar desestimada que ser el muñequito de unos desgraciados asesinos” pero consideró que eso sería una ofensa directa y su familia estaría en peligro por eso se mordió la lengua por primera vez en la entrevista continuando en silencio dejando que sus ojos verdes se centraran en Julius que a fin de cuentas intentaba ayudar a los tributos, muy a su modo pero deseaba conseguirles patrocinadores, ese era su trabajo y había que darle un punto para Nerwen era un profesional.

Tensó la comisura de los labios hacia arriba cuando Julius mencionó su fuerte carácter y por primera vez hubo un atisbo de gesto en su rostro, una sonrisa ladeada y algo misteriosa. Era agesiva, tenía carácter , no era sociable y eso era el legado que quería dejar antes de irse al otro barrio por eso le gustó el halago y fue sincera, la sonrisa no la forzó nació de una manera natural y espontánea. No obstante, lo siguiente no le gustó tanto. Si por ella fuera hubiera pegado un puñetazo a Julius por su manera lasciva de mirarla pero luego recordó lo poco que dejaba a la imaginación el generoso escote tanto superior como inferior y decidió perdonarle el golpe. ¿Qué atractivo tenía algo tan huesudo como ella?

Siguió escuchando sin participar aún en la conversación pues como había dicho Julius: lo último a veces era lo mejor. No siempre las palabras precipitadas o los comentarios apresurados eran un resultado positivo, ella iba a hablar cuando fuera estrictamente necesario, jugaría con esa parte misteriosa y peligrosa como había dicho que era Julius, no quería dar miedo solo impresionar pues así era ella, la chica ruda del distrito 12.

- ¿Debería fingir las veinticuatro horas del día? -logró decir al fin peinando un mechón de pelo moreno tras su oreja puntiaguda, esbozando una sonrisa natural aunque tuvo que pensarla un poco esta vez - Eso sería demasiado esfuerzo y debo guardarme para la arena- recordó que debía jugar con el presentador, darle un motivo para alargar la entrevista y hacerla interesante, necesitaba patrocinadores para honrar a su distrito - No muerdo, Julius, puedes acercarte a mi perfectamente que conservaras todos tus miembros - hizo una pausa mirando muy muy seria al entrevistador para luego volver a curvar los labios en esa sonrisa ladeada pero esta vez con un toque juguetón - o no, prueba a ver… muchos muchachos del distrito doce han acabado desapareciendo misteriosamente aunque nunca revelaré donde fueron a parar- miró al público levantando una ceja en un gesto cómplice aunque en verdad los aborrecía su estilista había sido muy estricto con esa parte - ¿De donde sacaría mis pantalones si no? - volvió a posar sus ojos verdes en Julius y los dejó deslizar por todo el cuerpo del hombre hasta llegar a sus pantalones - Parecen cómodos - señaló con el dedo índice la prenda - ¿Qué talla tienes? Bueno, ya lo descubriré cuando te lleve con los otros

por **Julius Tumblrman** Jue 22 Dic 2011, 03:31

Julius se había cuidado de muchas cosas, aunque era consciente de que no podía hacerlo todo perfecto. Era imposible formular preguntas que no tocaran la moral de los tributos, pues debía mezclarlo todo con una dosis de broma y entretenimiento para el Capitolio que debía de darles a todos los participantes de los juegos mayor impresión de que eran un juguete televisivo y él los mangoneaba. Pero no era así, aunque ellos no lo supieran. Quizá las tonterías de Tumblrman o su superficialidad, las cuales al menos agradaban al público, les molestaban o herían. Seguramente si el presentador hubiera hablado con ellos fuera de las cámaras se habría dejado de tantas tonterías y habría sido franco en su propósito de ayudarles, de ayudarles de verdad. Lo que no comprenderían ellos sin explicarles es que él hacía todo aquello por ayudarles, sabiendo que les harían más atractivos y divertidos al público y por lo tanto obtendrían mejores resultados en un futuro. Julius no les iba a culpar si se sentían maltratados por él, al fin y al cabo sabía por qué lo hacía y dar explicaciones seguramente supusiera -al menos si llegaba a oídos del Capitolio- no poder hacerlo más. Por muy difíciles que se pusieran los tributos, él tenía que intentarlo sin descubrirse.

Uno de los tributos difíciles era Nerwen, de la que Julius había obtenido cierta información que se preocupaba de obtener de diferentes fuentes. Era por eso que sabía de su carácter, y también detalles de su vida que seguramente harían que no estuviera muy contenta con todo aquello. El presentador sabía que seguramente por dentro estaría odiando todo y todos los que se movieran por allí, o lo suponía, pero al menos su postura para la entrevista había sido mostrarse simpática, tal vez sexy o juguetona. Sin embargo, Julius notaba ese punto de franqueza y seriedad que demostraba dos cosas: que no estaba allí jugando y que no podía fingir estar pasándoselo pipa en todo momento. Julius sonrió, sabiendo que al menos aquella postura que había adoptado le haría las cosas más fáciles. Bromear y jugar con ella mientras la entrevistaba sería un punto a favor y una tranquilidad más para Tumblrman. —Ser tú misma es lo mejor que podrías hacer, estoy de acuerdo. No protestaré—dijo riendo mientras se acercaba un poco a Nerwen en el sofá, ante su comentario de que podía acercarse sin resultar dañado, cosa que dudaría en otras circunstancias. —¡Qué me dices!—añadió mostrándose afectado cuando comentó lo de los chicos en su distrito— Oh, lo son—dijo él mientras miraba también sus pantalones—, pero creo que a ti te seguirán sentando mejor los vestidos, querida. En cuanto a llevarme, siéntete libre de hacerlo en cualquier momento—bromeó esbozando una sonrisa pícara—. Bueno, Nerwen, aparte de este interesante dato de secuestros, que te prometo que no revelaré a los agentes de paz de tu distrito, me gustaría que nos comentaras un poco más de tu vida en el doce. Habla de lo que quieras: familia, amigos, el momento de la cosecha... ¡estamos ansiosos por saber más de ti!

por **Nerwen Riverside** Jue 22 Dic 2011, 04:14

La proximidad de Julius en el sofá la alertó, la entrevista pasaría de verde a rojo, iba a tocar los temas delicados. Nerwen dejó sus verdes ojos en los oscuros del hombre y mordió la lengua con fuerza, tanto que creyó sangrar pero no, no notó el sabor a hierro tal vez por que se contuvo, mirando hacia otro lado mientras recomponía la compostura intentando no joder la entrevista. Movió un poco su cuerpo quedando sentada encima del mismo antes de volver a poner los ojos en el locutor, volviendo a peinar uno de sus mechones tras la oreja no por coquetería o afán de resultar atractiva si no por que ese maldito pelo estirado de ese modo estaba molestándola. Tragó una gran bocanada de aire, el gesto pudo ser visto por el público no se midió en ese sentido, iba a costarle hablar de su familia, los Ringëril, gente altruista que la adoptó cuando perdió a sus verdaderos padres.

- Puedes revelárselo si gustas Julius - decidió comenzar por la broma, sería mucho más fácil coger la carrerilla hacia el tema jugoso - Si te soy sincera no creo que me siguieran hasta la arena - mordió su labio inferior una vez de forma nerviosa y miró hacia el frente, alzando la cabeza todo lo alto que pudo, no por que fuera a retar el capitolio o a los presentes si no por que quería que su familia la viera en ese momento entera y escuchara con orgullo todo lo que tenía que decir de ellos - En cuanto a mi familia… - tomó otra vez aire - Son maravillosos, no encuentro otro calificativo para alguien que decidió adoptar a una huérfana con tan solo meses - iba a ahorrarse la historia de la muerte de sus padres biológicos era algo demasiado personal y dramático. No iba a hacer drama, ni tan siquiera iba a derramar unas lágrimas por que ella francamente no era chica de llorar y era por eso que mantenía la voz alta, firme y sin rastro alguno que fuera a quebrar. Volvió a mirar al hombre esta vez con una especie de sonrisa en los labios, iba a hablar de la persona más importante en su vida- Te gustaría conocer a mi hermana. Es todo lo contrario a mi, no te daría miedo por supuesto, ella es una señorita bien portada y no una roba pantalones - levantó la pierna lo suficiente para enseñar sus shorts tanto al público como a los tributos como a Julius - Y si crees que vas a verme más con falda vas muy pero que muy equivocado, esto es lo cómodo… ¿no? - señaló sus shorts- Aún no he visto unos juegos donde las señoritas vistan vestidos. Imagínate, ¿Deberíamos tomarnos los bajos para correr por la arena? - le dio unas palmadas en la espalda al presentador en un gesto como diciendo “por supuesto chico vaya cosas comentas” - Eso no es práctico - negó con la cabeza algo divertida con la imagen mental de una señorita lanzando dagas con una mano y sujetando la larga falda con la otra - Por eso no tengo amigos en el doce, tal vez unos cuantos muchachos a quienes he roto la cabeza pero no me ven como una chica soy un chico y los chicos suelen pelearse. ¿No?

Encogió sus hombros con total descaro. ¿Debía ocultar a los otros tributos que había peleado desde que tenía uso de razón? Para nada. No era una estrategia, ni tan siquiera se había preparado para usar armas, tal vez un palo para matar ratas pero eso no iba a decirlo en voz alta, iba a acarrearles problemas a la gente del doce que iban a cazar para mantener a su familia. Repasó mentalmente si había olvidado alguna pregunta de toda la retahíla que Julius había dicho en un segundo y tragó aire.

- Sobre la cosecha… fue normal. Metieron la mano en la urna, sacaron mi nombre y yo me sentí aliviada - debía ser franca - Déjame explicar, matarme con otros chicos no esta en mi lista de preferencias pero me sentí bien en cuanto puse un pie en la tarima y supe que mi hermana no iba a ofrecerse como voluntaria, es demasiado tonta, la matarían el primer día en la arena - miró hacia el frente donde estaba todo el mundo pero esta vez iba a hablar solo para su hermana como si el resto del mundo no existiera - No te ofendas Vee pero el pacto iba solo en una dirección - dijo en referencia a ese acuerdo de no presentarse voluntarias la una por la otra, por supuesto, ella hubiera salido voluntaria si el nombre del papel hubiese sido “Vee Ringëril” - ¿Qué tipo de entretenimiento os daría alguien dulce, carismático e incapaz de dañar a una mosca? - y ahí estaba un pequeño puñal hacia el capitolio mezclado en una frase que tenía mucha inocencia pues recordó la frase de Shane su madre “tu siempre sonríe cuando quieras enmascarar algo feo que te pueda meter en problemas. Dientes, dientes” y efectivamente, dibujó la mejor de sus sonrisas como si hubiera dicho una broma.

por **Mortimer Lacrivore** Jue 22 Dic 2011, 04:47

Mortimer había seguido a su compañera al escenario, pero él aguardaba el turno porque le tocaba ser el segundo en salir en escena. No paraba mucha atención a lo que decía su compañera, a la que veía como una enemiga. Se habían cruzado contadas veces en el 12 y sólo habían sido un par de malas miradas. No es que ella fuera popular ni tuviera una cuadrilla de gente, pero al menos vivía bajo una casa. Mortimer vivía en el campo, en el bosque y jamás apenas salía de ahí.
Suspiró, esperando que la chica terminara de hablar de una vez; pues como antes Tumblrman la despidiera antes él podría entrar, decir cuatro cosas y salir.

por **Julius Tumblrman** Jue 22 Dic 2011, 12:53

Nerwen hablaba, y aunque para los más tontos aquella entrevista era de lo más amena y normal, para Julius era un peligro constante. No se equivocaba con su impresión sobre Nerwen: era una tributo difícil. Como pequeñas púas iba dejando caer ciertos datos sobre el Capitolio que indudablemente no gustaran al gobierno. Como Julius bien sabía, tributos como ella acostumbraban a decir aquellas cosas sin demasiado reparo, pues a punto de quitarles la vida no solían permitir que les quitaran también el hecho de realizar duras críticas encubiertas que sentaban bastante mal a los gobernantes y dejaban algo perplejos a los capitolianos. Sin comerlo ni beberlo, el clima que se creaba no era bueno para nadie. Desconociendo si Nerwen sabía que se estaba equivocando al hacer ciertas afirmaciones, Julius la miraba sin sonreír de vez en cuando para que ella misma se diera cuenta de que se metía en arenas movedizas. Su táctica pícara estaba funcionando a la perfección, no era en absoluto buena idea ponerse a soltar aquellas dagas envenenadas hacia sus directos superiores.

Nervioso pero aparentemente tranquilo y sonriente, el presentador escuchó a la tributo del doce por partes y examinó bien lo que decía para contrarrestar todo lo malo con una broma, un comentario o un cambio de tema que lo encubriera rápidamente. Sabía también que la entrevista de ella debía acabar pronto, o era arriesgarse demasiado para todos. —Oh, ¡ya lo creo que te seguirían, y más si vas con ese vestido!—alegó Tumblrman, haciendo reír al público y encubriendo el acto de Nerwen de crítica a los agentes de la paz. Julius rió varias veces con sus comentarios acerca de su hermana y los pantalones, sabiendo que Nerwen aprovechaba con habilidad todo lo que la entrevista les brindaba para amenizarla. —Tienes toda la razón, la imagen es verdaderamente cómica. Por suerte os elaboran unos trajes estupendos y realmente adecuados... ¡creo que sugeriré que añadan alguna falda!—bromeó el presentador. El ambiente cómico se frustró rápidamente ante los comentarios de Nerwen, que dejaron sorprendido a Tumblrman. ¿Peleas, comentarios no tan agradables hacia su hermana, el reconocimiento de que el Capitolio usaba a los tributos como mero entretenimiento? Demasiadas verdades golpearon al público, y enseguida se notó la quietud y seriedad del ambiente. "Esto no te está ayudando nada, Nerwen", pensaba Tumblrman, intentando parecer en cambio tranquilo y pensando para sí mismo que al menos su carácter y la información de que peleaba sí pudieran serle de ayuda con algún patrocinador. —Tu vida es realmente fascinante, sí señor. Por ir terminando, Nerwen, me gustaría que habláramos un poquitito más antes de salirnos de tiempo de tus expectativas respecto a los juegos. ¿Qué podrías comentarme acerca de relaciones con otros tributos? ¿alguna alianza o amistad que puedas comentarnos, o alguna que pienses hacer? ¿cuáles consideras mayores rivales o a qué clase de peligros crees te enfrentarás? ¡Coméntanos lo que quieras!—dijo Tumblrman finalmente. Realmente lo que esperaba con preguntas referidas a los juegos es que Nerwen se reservara su opinión general respecto a todo el tinglado que tejía las circunstancias de los juegos y hablara lo que iba a hacer en ellos, sin darle la oportunidad a que hablara de nada más de lo que le iban a ver hacer en pocos días una vez en la Arena. Seguramente se mostrara incluso reservada, pues a pocos tributos les gustaba revelar esa clase de detalles a todo el mundo. Julius sonrió y esperó su respuesta, la cual dependiendo de lo que dijera terminaría ahí su entrevista, dando paso a una respuesta final del presentador y la despedida para pasar con el tributo masculino.

por **Nerwen Riverside** Jue 22 Dic 2011, 22:06

Si sabía que estaba metiéndose en arenas movedizas pero era su manera de aliviar la tensión, la cara de Julius era en ocasiones todo un poema pero a ella no le importaba. ¿Qué podían meterle un puma en medio de la competición para arrancarle las tripas? ¡Por lo menos le daría alimento a alguien! Lo único que la preocupaba profundamente era que sus palabras fueran a repercutir en su familia de algún modo u otro aunque lo dudaba, el Capitolio tenía mejores entretenimientos y a fin de cuentas ella iba a morir, todo quedaría enterrado en las profundidades de su ataúd.

Calló otra vez mirando al presentador hablar sobre sus tácticas en la arena. Nerwen parpadeó confusa y por un momento la pregunta de Tumblrman la pillaron desprevenida. ¿Expectativas? Por supuesto, esa era fácil contestar: la muerte. ¿Alianza? No, ella no tenía alianzas con nadie, la mitad de los tributos no la tragaban por su forma de ser y eso contestaba a la segunda pregunta. ¿Amistades? Pocas, tal vez se llevaba mejor con Jackie o Maia pero definitivamente nunca incluiría en ese lote a Jedian Riverside. En cuanto a rivales, ella creía que todos eran rivales, sería estúpido creer lo contrario, solo podía quedar uno y hasta las más pequeñas de las florecillas eran posibles armas destructivas así que no, ella no se dejaba llevar por la inocencia por que conocía la inocencia en persona y definitivamente algo inocente no debería estar en ese juego, ahí se iban a corromper y lo sentía por Shayleen y la otra pequeña rubia, iban a tener que crecer para afrentar ese momento de su vida.

- No tengo ninguna relación con los tributos. La mayoría no sé como se llaman y creo que no me interesaré por saber sus nombres, soy pésima para recordarlos - hizo una pausa mientras se mordía el labio inferior de manera nerviosa - Considero a todos rivales, Julius, nuestro objetivo es sobrevivir, los rivales más fuertes serán aquellos que tengan ganas de vivir y los más débiles serán aquellos que no aprecien el sentido de respirar. Por mi parte solo diré que estoy incluida en el primer grupo y encuentre las barreras, obstáculos o peligros que halle en mi camino, intentaré sortearlos para llegar hasta el final. Prometo dar tanto juego como esté dentro de mis posibilidades, lo contrario sería negar mi esencia, tengo demasiado carácter para estar de brazos cruzados.

No había doble sentido a sus palabras. Ella hablaba con el corazón, dejando el Capitolio, la organización de los juegos o la falta de ética detrás de todo ese desparpajo que significaba la situación donde se encontraba, Nerwen iba a luchar pero no por el público si no por que ella era así, nació guerrera y moriría en el campo de batalla haciendo honor a las personas del distrito doce, esas personas que luchaban para sobrevivir día a día en una arena que era su vida diaria.

- Eso si, me debes tus pantalones.

Tensó la comisura de los labios hacia arriba en modo de disculpa hacia él. Sentía si estaba metiéndolo en problemas pero ella no sabía crear un filtro entre sus pensamientos y sus palabras, incluso se podía decir que había estado muy reservada en cuanto a lo que en verdad deseaba decir.

por **Julius Tumblrman** Vie 23 Dic 2011, 01:47

Mientras Nerwen meditaba su respuesta, Julius supo que también pensaba en las advertencias con la mirada que el presentador le había hecho mientras ella hablaba. De nuevo se dijo que demostrar carácter le podría ser útil, demostraba fuerza y determinación, pero que a no muchos capitolianos les agradaba que el Capitolio o su integridad como personas se viera dañada. Con algunas afirmaciones de los tributos, los hacían sentir con unos monstruos. Y de hecho lo eran, pero no estaban preparado para que ninguno de los tributos -considerados a veces como mero objeto de entretenimiento- se los dijeran. Y también dudaban cuando se mencionaba el sistema cruel del Capitolio, pues al fin y al cabo la mayoría no eran tan tontos como para no darse cuenta de que así lo era, pero eran lo que ellos tenían como correcto y les daba pavor que para lo que ellos era un perfecto sistema se viera traspuesto. Algunos presentadores habían optado por bajarle los humos a los tributos y responder con una ofensa mayor cuando cruzaban la línea, pero Julius pensaba que eso sólo los cabreaba y los hacía odiarlos más, lo que aumentaba las posibilidades de que ya en la Arena hicieran algún acto que no le gustara nada al Capitolio. En las entrevistas al menos podían ser ayudados de una manera más humana, y eso es lo que trataba de conseguir Tumblrman constantemente.

Sabiendo que el tiempo de Nerwen llegaba a su fin, escuchó atentamente lo que decía mientras asentía y sonreía. —Desde luego que notamos tu carácter, querida Nerwen, y creo que pocos aquí dudamos ya de tu determinación y de tu fuerte presencia. Eres toda una guerrera, muy sexy y con una fuerza y una personalidad que muchos envidiarían. Para mí que muchos apostarán por ti gracias a esto, así que mucha suerte en el momento de la verdad—"y no hagas ninguna tontería", pensó Tumblrman, dirigiéndole una última mirada seria—. Y por supuesto que te doy mis pantalones, querida, si ves un paracaídas con ellos y huelen un poco a ron, sabrás que he sido yo—le dijo Tumblrman riendo mientras se levantaba, y sonaba un pitido que indicaba el final de la entrevista—. Nerwen Ringëril, ha sido un placer tener con nosotros esta noche tu carácter y tu belleza. Te deseamos lo mejor—finalizó, dándole dos besos y animándola a regresar a su asiento mientras el público aplaudía.

(Off: Nerwen puede postear respondiendo y despidiéndose. El siguiente tributo puede postear desde que quiera).

En escasas décimas de segundo, el presentador pensó en su siguiente y último entrevistado. Según le habían dicho, era otra de esas personas difíciles de entrevistar, teniendo una personalidad algo extraña y sabiéndose poco de él. Pensó que haría lo mejor que pudiera con él, y finalizaría el evento por todo lo alto.

Tumblrman dirigió una mirada significativa a sus pantalones, acariciándolos como si les dijera adiós mientras miraba al público con una mirada cómplice. —Bueno bueno bueno, me parece que tendré que enfrentarme ahora a uno de los chicos con un look que muchos capitolianos envidiarían—dijo Tumblrman riendo—. ¡Recibamos con un fuerte aplauso al último tributo de esta noche, Mortimer Lacrivore!—gritó el presentador mientras el público aplaudía y él se sentaba en el sofá dándole unas palmaditas en la espalda a Mortimer—. Bueno, querido, ¿cómo te encuentras? ¿cómo has visto el Capitolio, te ha impresionado en contraste con tu Distrito? ¿qué destacarías de aquí y qué prefieres de tu hogar?

por **Mortimer Lacrivore** Vie 23 Dic 2011, 10:29

Y cuando me dijeron su nombre, entró, haciendo una mirada significativa a Nerwen. Iría a por ella. De todas las personas que había escuchado hoy obligatoriamente, ella era la que más sobrada decía ser. Pues ya lo veríamos en la arena., si era tan buena. Me acerqué al presentador y le estreché la mano con fuerza, para que viese mi determinación y finalmente; nos sentamos al sofá. Mientras él me daba unos golpecitos en el hombro que para nada estimularon mis ganas de responder, me aclaré la garganta. -Bueno...-su voz sonó dubitatiba, así que enseguida la endureció, canviándola a la que era la suya por predeterminación. -Es un sitio muy moderno. Y eso está bien por algunas cosas.- murmuró. No era un chico de muchas palabras, así que poco más podía decir. Además, le agobiaba el puto Capitolio. -Mi distrito no tiene nada de especial. El bosque. Puede que sea lo que más me guste de allí. ¿Hay bosques aquí? Yo no vi ninguno. -

por **Julius Tumblrman** Sáb 24 Dic 2011, 02:57

Supo que nunca le fallaban las fuentes, pues Mortimer era tal y como le habían descrito. Sintió su apretón seguro y decidido, y también había advertido la mirada que le había dedicado a uno de los tributos sentados, seguramente muchos otros también, porque la cámara le estaba enfocando en ese momento. Julius no sabía bien a quién, pero debía a ser a alguien de los distritos inferiores. Sin darle importancia, se centró en lo que él les decía. Era bastante parco en palabras, como se notaba, y seguramente él también sería consciente de eso. Julius sabía que tendría que intervenir más para llenar tiempo o los silencios y la entrevista se harían eternos.

—Sí, de modernidad no nos podemos quejar. Yo particularmente me asombré cuando inventaron el váter con radio y mp3...—comentó Tumblrman, provocando la risa del público que enseguida calló para seguir dejando hablar a Mortimer. —Bueno, podríamos tomar a la ciudad como un gran bosque de edificios, pero lo cierto es que no hay ninguno como los que tengáis en el distrito doce. En fin, Mortimer, ¿qué esperas respecto a los juegos? ¿alguna alianza, alguna estrategia ya meditada...? ¡Todo lo que quieras contarnos!