GRAN PANTANO.

por **The Hunger Games** Jue 10 Ene 2013, 10:19

GRAN PANTANO.
S I T U A C I Ó N . S U R . O E S T E .

LUGAR: GRAN PANTANO.

SITUACIÓN: SUR - OESTE

ROL: SIEMPRE ROL OFENSIVO

PLANTAS Y ALIMENTO DISPONIBLE:

Agua.
Ámbar dulce
Baya azul
Baya negra
Malva de obispo
Amanita
Calamistrata
Imagnea

La tierra firme acaba y el agua alcanza ya los hombros de los tributos más altos. Caminar se hace difícil para estos últimos y aquellos menos agraciados se ven obligados a nadar para desplazarse por la zona. La vegetación superficial desaparece, quedando las algas del fondo y algún que otro nenúfar flotando. Atravesar El Gran Pantano no será fácil, pero es el único medio que tienen los tributos para continuar su aventura.

Las medallas de sed, hambre, quemaduras, sangre y veneno vuelven a funcionar con normalidad. También la Adrenalina vuelve a segregarse.

por **Arena** Vie 11 Ene 2013, 08:33

ATENCIÓN:
Esta zona de rol no está disponible hasta que todos los tributos hayan posteado primero en "Pantano poco profundo" (borramos tus mensajes, Leilani)
Ha habido una modificación en esta zona de rol, el rol siempre será ROL HISTÓRICO, tenedlo en cuenta.

por **Leilani Kukroup** Vie 11 Ene 2013, 10:09

Off: Puedo rolear mi muerte aquí?

por **Arena** Vie 11 Ene 2013, 10:11

OFF: Por supuesto.

por **Leilani Kukroup** Vie 11 Ene 2013, 10:31

Entré en el pantano casi llorando, con una mano en el estomago y sintiendo como la sangre salia casi a chorros por la herida que tenía en el estomago, era demasiado doloroso, sabía que me iba a morir, había llegado mi momento, tal y como le había dicho a Edzel aquella noche en la azotea, nadie recordaría a Leilani, solo sería una chica que pasó por los juegos y murió de forma solitaria, como siempre había estado.

Caminé hasta que no pude más y me caí de rodillas al suelo llorando, miré mis manos llenas de sangre y sentí nauseas, me daba asco la sangre, siempre me lo había dado, pero tenía que hacer algo, ya había visto como muchos años los tributos que morían así podían tardar horas en hacerlo y yo me negaba a morir así, no quería eso, quería morir rápido cuanto antes mejor.
Cogí mi cuchillo con ambas manos temblando, tenía que hacerlo, respiré hondo pero no podía hacer nada, no era capaz de clavarmelo, no me veía capaz de hacerlo. -No puedo- Lloriqueé, me moría y ni siquiera en mi muerte era capaz de ser valiente. Lo único bueno de esto era que conseguiría volver junto a mis padres, verlos, conocerlos, estar con ellos y conocer su verdadera historia porfin.
Me acurruqué en el suelo con el cuchillo lleno de sangre entre mis manos esperando morir, cerré los ojos, igual así se hacía menos doloroso. Intenté pensar en los buenos momentos que viví aunque encontré pocos, pero al menos eso hacía que fuera más llevadera la muerte, por lo menos sabía que allí estaban Daemon y Sophia, no estaría sola.

por **Arena** Vie 11 Ene 2013, 10:48

El aerodeslizador descendió entre el fétido pantano. Los aerodeslizadores de esta arena estaban preparados para no averiarse si tenían que adentrarse entre la aguas estancadas. Cuando descendió, cogió el cuerpo de Leilani para llevárselo hacia el cielo y sacó sus pinzas para sacarla de la tierra lodosa. La silueta donde yacía fue lo que quedó de ella hasta un par de horas después

por **Dylan E. Winslet** Sáb 12 Ene 2013, 03:57

No sabía cuánto tiempo llevaba andando por aquel asqueroso fango, pero se me había hecho más que eterno. Aunque puede que aquella eternidad imaginada únicamente por mi se debiera a que había estado todo el tiempo pensando en lo ocurrido unas horas antes. Era la primera vez que mataba a alguien. Nunca me había imaginado que fuera tan... fácil. Cuando introduje el largo cuchillo en el pequeño cuerpo de la chica del O3 el tiempo se me paró por un momento. Las personas no somos más que sacos de huesos y sangre. Débiles. Aplastar un mosquito habría sido igual de fácil que acabar con ella. Y en el fondo me dejaba un amargo sabor. Todos aquellos pensamientos habían ocupado constantemente mi mente.

Además, tras aquello había perdido al chico del O6, pero aquel sitio no era tampoco muy grande, así que suponía que... cómo no, nos volveríamos a ver.

De repente algo provocó que mis instintos se colapsaran por unos segundos. Tuve que recapacitar, y abstraerme para darme cuenta de lo que pasaba. Había estado andando constantemente, sin parar, y no me había dado cuenta del cambio del terreno. Pero no era solo eso, sino que ahora, en vez de ser barro lo que me llegaba hasta las rodillas, era... era agua. Nada más y nada menos que agua. No pude evitar sonreír de alegría. Era cierto que no me faltaba agua, pero no había podido malgastarla ni para lavarme un poco. Y la verdad... se agradecería. Me agaché juntando las dos manos para coger un poco de aquel agua, y llevármela a la cara para refrescarme. Simplemente no me lo podía creer. Me aseguré de que llevaba el cuchillo a mano, por si las moscas, y me llevé la mochila a la parte del torso, para abrirla, sacar el único par de bayas verdes que me quedaba, y metérmelas en la boca. Necesitaba matar el hambre, y así completaba aquel momento perfecto.

Cuando conseguí volver a echarme a la espalda la mochila, anduve unos metros más hasta encontrar la poca vegetación que había, decidiendo quedarme por la zona, algo escondido, y mirando hacia la dirección por la que había llegado. Prefería estar preparado si veía llegar a algún tributo, estar alerta. Aunque tal vez hubiera un camino alternativo, no me parecía mala idea quedarme allí. Era un lugar perfecto para ver sin que te viera nadie.

por **The Hunger Games** Sáb 12 Ene 2013, 03:57

El miembro 'Dylan E. Winslet' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

'Baya verde' :
GRAN PANTANO. Noveneno

por **Edzel Greyjoy** Sáb 12 Ene 2013, 04:49

Llevo ya un rato dando vueltas sin saber con exactitud hacia donde dirigirme, todo me parece igual. Un olor demasiado putrefacto y cenagoso inunda todo el lugar, y me pregunto si quizas es una tecnica de envenamiento del capitolio. Decido sentarme a descansar un momento, los pies han comenzado a dolerme y estoy cubierto de barro de arriba a bajo. Me estoy quitando los zapatos sobre una gran roca cuando me doy cuenta de que la zona se abre para dar lugar a un gran espacio lleno de agua, un pantano. Vuelvo a ponerme los zapatos y corro hacia allí. Tengo tanta sed que..... ni siquiera me paro a pensar que del agua me puede atacar algo o puede estar envenenada.

Me zambullo en el agua ropa incluida y dejo que el barro que cubre mi ropa y mi cuerpo se vaya quitando poco a poco. Estoy chapoteando cuando veo a Dylan que se acerca a lavarse un poco, espero a que se vaya, ocultandome tras un matorral. Una vez que sale del agua, me quedo un poco y termino por seguirlo hasta donde vaya.

Cuando lo encuentro veo que esta comiendo bayas, pero termino por acercarme a el.

-Hey-digo levantando las manos para que no me ataque. no tengo intención de hacerle nada. No ahora, no es el momento de luchar con el, hay tributos que me preocupan mas.

Veo que Dylan va cargado de cosas. Me pongo delante suya y sacudo mi ropa que está empapada..

por **Arena** Sáb 12 Ene 2013, 06:06

De repente caen dos paracaídas del cielo, emitiendo una tenue luz porque está oscureciendo. El primero va dirigido a Dylan E. Winslet y en su interior hay una daga con una nota: : Gana, ¡¡guapo!! *__*, y el segundo, destinado a Edzel Greyjoy, contiene una botella de agua mediana [4 USOS], todavía fresca, con un apunte: ¡Vamos, buenorros, que todavía tenéis que buscar las flechipollas y los unicornios!

por **Dylan E. Winslet** Sáb 12 Ene 2013, 07:11

Ante el ruido de una pisada muy cerca de mí reaccioné instintivamente llevando mi mano al cuchillo, pero esta se relajó en cuanto vi quien era. El arma de Edzel era una ballesta, y no iba armado con ella ni por asomo. También las flechas estaban guardadas, así que me encogí de hombros y opté por saludarle con tono amigable.

- Te quedaste rezagado mirando el barro del pantano, ¿eh? -sonreí mientras me incorporaba para acercarme a él-. ¿Has visto? ¡Agua! Esto es lo mejor que nos podía pasar -dije-. Me pregunto qué les estará ocurriendo a los tributos que fueron por la primera puerta -intenté respirar hondo por primera vez desde que había llegado a aquel lugar. Parecía que el agua incluso purificaba en parte el aire. Demasiada putrefacción. Agudicé también el sentido del oído, pero al hacerlo me hizo incluso daño. No por el ruido, sino por todo lo contrario. No se oía ni un alma. Y me extrañaba muchísimo que los del Capitolio estuvieran mirando hacia la tele, satisfechos con tanta paz. Faltaba masacre últimamente. Aunque a lo mejor entre la muerte de la chica del O3, la chica embarazada, y lo que estuviera ocurriendo en la otra Arena les mantenía ocupados. Eso suponiendo que los tributos que faltaban también se encontraban en un lugar como este. Quién sabe, a lo mejor hasta les han obligado a matarse entre ellos, o cosas por el estilo, pensé.

Mientras charlábamos como viejos amigos, dos paracaídas cayeron cerca de nosotros. Uno cerca de mi compañero de conversaciones, y otro cerca de mí... ¡Otro! Ya iban cuatro paracaídas. No sabía como agradecer todo aquello, iba a volverme loco. ¿En serio aquella gente se fijaba en mí? Me sentía aturdido a la vez que loco de alegría, así que olvidé por unos segundos de lo que el chico del O6 y yo hablábamos para prestarle atención al paracaídas. Lo cogí, y miré la pequeña tarjeta que colgaba de él: "Gana, ¡¡guapo!! *__*". No pude evitar soltar una carcajada. No sabía quién podría haberlo mandado, y la verdad es que me mataba la curiosidad. Alcé la mirada hacia el cielo de la Arena, sonriente:

- ¡Eso intentaré! -grité, contento como un niño con un caramelo. No esperé más para abrir el paquete, y en el interior me encontré con una larga daga. Levanté una pulgar esperando que las cámaras lo captaran, aún con la sonrisa dibujada en los labios. Guardé el pequeño arma para tenerlo a buen recaudo, dándome cuenta de que a ese paso... mi mochila iba a explotar. Esbocé una mueca sin apartar de mi mente la idea de que había gente que estaba pendiente de mis acciones en los Juegos, y me apoyaba-. No me entra una mierda en la mochila, pero soy la persona más feliz del mundo en estos momentos.

Cuando hube guardado la daga por fin, miré a Edzel. ¿Qué le habrían mandado a él?

por **Arena** Sáb 12 Ene 2013, 09:59

De repente, todo en el Gran Pantano se detiene. En medio de aquella laguna tan profunda comienzan a aparecer unas burbujas, de tamaño considerable, que se mantienen un rato sobre la superficie del agua hasta desvanecerse tan lentamente como llegaron. Ahora los tributos están al acecho, armados hasta los dientes esperando, un tanto temerosos, a que aquella misteriosa criatura del Gran Pantano haga su aparición.

DATOS OFF-ROL:

Desde este momento se puede realizar Rol Ofensivo

por **Dylan E. Winslet** Sáb 12 Ene 2013, 10:16

*saco el cuchillo y me quedo alerta, mirando el agua*

por **Dylan E. Winslet** Sáb 12 Ene 2013, 10:21

Pos na *cojo dos ámbares dulces*

por **Dylan E. Winslet** Sáb 12 Ene 2013, 10:21

*cogidos*

por **Donna Z. Bouquet** Sáb 12 Ene 2013, 10:40

*Entro al lugar cuchillo en mano.*

por **Cyril Z. Electref** Sáb 12 Ene 2013, 10:48

Llegué con Donna cogida de mi brazo y el cuchillo en la mano, siempre alerta. Yo hundía el extremo de la lanza, el mango, en el agua y el fango para avanzar. Los veía a lo lejos, pero eran menos. ¿Y la tía de la panza enorme? Bah, ojalá la hubieran matado o se hubiera muerto ella solita ya. El del distrito cuatro tampoco estaba, y el chico que veía moverse, el del nueve, me inspiraba respeto. Parecía el más peligroso del grupo al que nos enfrentaríamos. Quedaban pocos tributos y dentro de nada tendría que cargarme al bellezón de Donna. Ojalá hubiera aprovechado el tiempo en el centro de entrenamiento. Ya me entendéis...

El agua me cubría hasta la cintura, al menos de momento, pues no me había metido del todo en el Gran Pantano, y sentía el zumbido de los insectos a nuestro alrededor. "¡Qué asco" Pensé asqueado. Fruncí el ceño y arrugué la nariz y me quedé quieto, escuchando todo lo que pasaba a mi alrededor e intentando no ser descubierto de momento.

por **Edzel Greyjoy** Sáb 12 Ene 2013, 11:07

Off: perdon por postear ahora que bebo agua, pero me he tirado toda la tarde en el conservatorio y despues me ha surgido un problema familiar, lo siento

Recojo el paracaidas y me encuentro con una botella de agua. Doy un trago que me refresca y reconforta.

por **Edzel Greyjoy** Sáb 12 Ene 2013, 11:07

*salgo*

por **Samantha McGrew** Sáb 12 Ene 2013, 11:11

De las profundidades del pantano comienza a salir una silueta, sin embargo, el potente sol que se sitúa a sus espaldas hace que sea imposible distinguir algo en ella. La criatura sale con demora, aumentando los nervios de los tributos.
Un cuerpo de delicadas curvas, ceñido a un empapado vestido blanco, se mueve con gracia y majestuosidad. Suelta su pelo recogido y menea la cabeza; sus largos y castaños cabellos se zarandean con suavidad desprendiendo un perfume que consigue embriagar a los presentes. Unos ojos brillantes, seductores se fijan en el muchacho del distrito nueve, quien seguramente ya habrá sido capaz de reconocerla.
Se acerca a él con movimientos lujuriosos, exagerando sus pasos para que remarquen, si es que es posible, más su figura. Se muerde un labio cuando está a un metro suya a la vez que sus ojos centellean pícaramente. Una vez le ha alcanzado se da la vuelta ágilmente, haciendo que el aire se remueva con su fragancia y le acaricia debajo de la barbilla, igual que un felino. Toma su mano con delicadeza y le susurra palabras melosas al oído, tira de él, tratando de llevarle al interior del lago con sutileza.

por **Donna Z. Bouquet** Sáb 12 Ene 2013, 11:22

Se me caen las bragas. Una esbelta silueta sale del agua y me quedo perpleja. Suelto la mano de Cyril casi sin quererlo. El agua me cubría hasta el pecho, pues Cyril se había empeñado en meterse en el agua hasta el fondo casi. Ni me percato de la presencia de Dylan, pues estoy embelesada con la figura rebosante de lujuria que acababa de resurgir del agua. Si era un invento del Capitolio, había sido una buena elección. No había nada mejor que un buen capricho a los ojos, y además la mujer tenía la palabra "inocua" escrita en la frente, tal era su belleza y sensualidad.

Me doy cuenta de que la mujer pretende seducir al chico fortote, del distrito 9 me parecía. Pero yo no me quedaba atrás, también tenía ases en la manga y me apetecía hacer rabiar al chico. Necesitaba pasármelo bien, hacía mucho tiempo que no disfrutaba del goce de meterme con alguien. El último había sido... Bourke, el niño tontito del centro de entrenamiento. A estas alturas ya debería de estar muerto. Avanzo nadando con ligereza hacia la figura, a pesar de que ésta se estuviera dirigiendo a Dylan. Llego al lado de la mujer y extiendo un brazo para poder tocar su hombro, su piel tersa. Un escalofrío me recorre la columna vertebral y no puedo evitar sonreír, no solo ante la belleza de este ser, sino ante el deleite de hacer sufrir a aquellos que, como Dylan, se resignan a contemplar como les arrebatan lo suyo delante de sus narices. Era competitiva hasta ligando con mujeres. ¡Olé yo! Me llevé un dedo al pelo y lo ricé para intentar seducir a la mujer.

... ¿Qué me estaba pasando?

por **Cyril Z. Electref** Sáb 12 Ene 2013, 11:35

Se me cayeron los calzoncillos ante la buenorra que apareció ante mis ojos. Vale, había de reconocer que mi compañera Donna estaba potente, pero no tenía punto de comparación con la belleza de los paños mojados que portaba la mujer. Era tan sexy. Me quedé embelesado cuando agitó su cabello, dejando que las gotas del agua que salpicaba me mojaran la cara al igual que los curas bendiciendo. Noté un aroma que me acariciaba los pulmones. Cuando se giró y pude ver sus ojos no pude ocultar mi excitación. Mis ojos se abrieron como platos y fui a por la muchacha a la par que Donna.

El chico peligroso me daba francamente igual. Pero la mujer… No, la mujer no. Navegué lentamente, sin apartar los ojos de sus pechos, de la curvatura de sus caderas, hasta situarme al lado de Donna. -Aparta - murmuré a mi compañera de distrito y logré extender mi brazo y tocar la cintura de la mujer. Era un tacto extraño, pero me encantaba. Mi expresión facial era casi orgásmica. No sabía qué me pasaba, pero la mujer me volvía completamente loco. Irremediable.

por **Dylan E. Winslet** Sáb 12 Ene 2013, 11:46

No abandoné mi postura de tensión hasta que no vi qué era lo que de verdad se movía en el agua. Las enormes burbujas cesaron, y el corazón se me subió hasta la garganta. Si no fuera porque todavía tenía los sentidos en alerta, se me habría caído el cuchillo, la mochila, y los ojos si hacía falta. Samantha, mi Samantha, acababa de salir de aquellas aguas, más preciosa y esbelta e increíble que nunca. No podía moverme. Los músculos se me quedaron completamente colapsados. ¿Qué... qué era eso? Tragué saliva mientras veía que la silueta se acercaba a mí cada vez más y más. Me di cuenta de que se me había quedado la boca abierta, así que la cerré de golpe. Menudo imbécil estaba hecho. No podía ser Sam, estaba claro que era una manipulación del Capitolio. Intenté ponerme en guardia, obligando a serenarme con escasos resultados, pero justo en ese momento la criatura, o lo que quiera que fuera, se situó a mi altura. Solo veía la cara de Sam, su preciosa cara, seductora y... No podía, era ella, y me volvía loco, y me encantaba. Y la echaba de menos. Demasiados sentimientos se agolparon en mí como para poder utilizar la razón. Noté cómo sus dedos se enredaban en los míos, cómo me miraba, y me arrastraba con ella... hacia el agua.

No obstante, algo me hizo sacudir la cabeza. Otra sombra apareció a nuestra altura. Volví en parte a la realidad y pude ver a la chica del O2, Donna. Esta alargó el brazo... ¿Qué puñetas estaba haciendo? Un sentimiento de ira me inundó por completo, y no pude hacer otra cosa que cogerle a la chica del dos de la muñeca con fuerza, y apartarla de Sam. Sam...
Otra silueta se interpuso en mi campo de visión, dándome cuenta a los pocos segundos de que era el compañero de distrito de la chica. La madre que les parió. Qué manera tan sutil de tocar las pelotas a dos manos.

La gota que colmó el vaso fue el gesto del chico hacia la sexy Samantha que aún me agarraba de la mano. Esto provocó que volviera a empuñar con fuerza el cuchillo. Mi mente y mis sentidos se centraban únicamente en mi despampanante chica. Necesitaba protegerla, como fuera. Me tembló la mano del cuchillo de la furia, y empujé al chico del O2, cuyo nombre no recordaba, con fuerza.

- Más te vale no acercarte -dije, loco de rabia. La cabeza empezó a darme vueltas. Estaba realmente frustrado. Definitivamente, si salía de aquellos Juegos, lo haría realmente tocado del ala.

por **Samantha McGrew** Sáb 12 Ene 2013, 12:12

La chica. Aquella sirena que acababa de aparecer de un místico lago resultaba ser el centro de atención en aquel momento. Un vez frente a Dylan y trayéndolo por fin hacia su terreno, siente como las manos comienzan a posarse sobre ella, sobre su cuerpo, casi desnudo, sobre sus carnes, aquellas que el fino vestido sólo conseguía transparentar y hacer aun más atractivas a la vista. Se gira un momento, para captar las miradas de Donna y Cyril. Aquel gesto tan sutil, consiguió hacer que uno de sus tirantes cayera, luciendo su piel, que brillaba como el oro a la luz del espléndido sol.

Se acercó con una perversa sonrisa hasta Donna, para cogerla con las dos manos de la cintura y atraerla con fuerza y pegarla a su cuerpo empapado, se relame un segundo antes de abalanzarse a su cuello para comenzar a besuquearla, mientras por sus poros se exhumaba la esencia de la lascivia. Fue recorriendo poco a poco su escote hasta llegar al rostro, hasta llegar a la boca. Levantó con una mano uno de los pechos de la chica, mientras con la otra frotaba su vientre plano, exitándola y consiguiendo que a las dos féminas allí presentes se les endurecieran los pezones.

por **Edzel Greyjoy** Sáb 12 Ene 2013, 12:54

Cuando guardo la botella comienzo a sentirme alterado. Parpadeo varias veces antes de ver a una chica emerger del agua del pantano. Su cuerpo perfecto cubierto simplemente por un vestido sencillo. Ha pasado ya mucho tiempo desde la ultima vez que he visto a una mujer desnuda, y el mismo tiempod esde que gocé por ultima vez del secreto oculto entre las piernas de una mujer. Siento como mi miembro se mueve inquieto entre las piernas. Necesitaba sentir eso de nuevo, es como si volviese a la vida.

Guardo mis cosas como puedo y me dirijo, medio embrujado a esa figura perfecta y sensual de la que mis ojos no pueden apartar los ojos ni un minuto. Mis pies se mueven con torpeza hacia la chica, sin darle demasiada importancia a que los tributos del 02 están también ahí.

No es demasiado posible esto, y me quedo flipando cuando comienza a meterle mano a Donna. Me encanta ver a dos chicas así. Me siento flotar, una extraña sensación que estoy experimentando ahora por vez primera. Es tan perfecta... Tan sexy, tan, tan... todo.....

No puedo evitar bajar la mano hasta mis pantalones y comenzar a acariciar a mi viejo amigo de forma instintiva. Es como si de repente volviese a ser el viejo Edzel el de mucho antes de que mi nombre saliese para los juegos, al que era frio y despiadado. Realmente todo esto me ha hecho cambiar. Saco la mano, cuando veo a Dylan, que tambien se dirige hacia la chica, y no puedo evitar sentirme celoso por no poder tenerla solo para mi.